Galletas de chufa y plátano

¡Hoy es un gran día! Mi primera receta del blog que con tanta ilusión he creado. ¡¡Estoy feliz!!

Comienzo con una receta muy sencilla y creo que es ideal daros la bienvenida con unas galletas ricas, sanas y que os dejen buen sabor de boca para que volváis a visitarme.

No soy muy amante de abusar de la repostería en general, aunque sea «repostería sin culpa», prefiero fruta ;), pero sí para ocasiones especiales, ¡como ésta! Aún así pueden ser una buena opción eventual para el desayuno, la merienda o cualquier momento del día, por si nos entran ganas de picar, como tentempié, ya que todos sus ingredientes son saludables, y están libres de harinas refinadas, trigo, azúcar, lácteos y huevos.

Estas galletas, que tienen una textura de bizcochito, gracias al plátano y a la mantequilla de nuez de macadamia, son muy nutritivas. Entre otras cosas, nos beneficiamos de las propiedades de la chufa, que son buenas para la digestión, ricas en omega 9, que ayuda a disminuir el colesterol, y ricas en vitamina E y C. Además son un alimento prebiótico, lo que quiere decir que son buenas para el intestino y aumentan las defensas. Todo esto entre otras cositas buenas que aportan. La pulpa de la chufa la conseguimos de hacer una deliciosa leche de chufa, que os explico en otro post.

Para endulzar, he de decir, que en la mayoría de mis recetas de este tipo, veréis que no suelo añadir mucha cantidad, porque me he acostumbrado a los sabores naturales de los alimentos y no necesito tanto dulce como antes (aunque nunca he sido muy «dulcera», pero sí más que ahora). Con esto quiero deciros, que el dulzor siempre es variable según os apetezca. Eso sí, os aconsejo no utilizar azúcar, porque no sé si ya sabéis lo poco saludable que es. ¡Y ahora hay un montón de opciones más sanas y nutritivas!

En cuanto a las nueces de macadamia, a mi particularmente me encantan, y son ideales para este tipo de recetas porque aportan cremosidad. Es cierto que son un poquito más caras que otros frutos secos. Así que podéis sustituirlas por anacardos, que hacen la misma función y cuestan la mitad.

Como os he contado, esta receta no lleva huevos, y es que el plátano triturado es uno de los sustitutos del huevo para repostería, y además de ser más saludable, aporta dulzor, textura «abizcochada» y nos da energía. 

Vaaaamos a por la recetaaa!! Ays perdonad si he escrito mucho pero es que me he emocionado viva; como mi cocina, viva y rica 🙂

Que la disfrutéisss

 GALLETAS DE CHUFA Y PLÁTANO

• Cantidad: unas 20 galletas.
• Tiempo: 40 min (sin contar el tiempo de hacer la mantequilla de nueces, que podéis preparar con antelación, la explicación viene más abajo)
• Utensilios: batidora potente + horno

Ingredientes:

• 175 g de pulpa de chufa resultante de 2 litros de leche de chufa.
• 100 g de harina de espelta integral
• 1 cucharada de canela (aunque estoy al gusto… si os gustan suaves de sabor, podéis añadir menos cantidad)
• 1 plátano
• 2 cucharadas de mantequilla de nueces de macadamia
• 1 cucharada de sirope de ágave (podéis añadir un poco más).
• 2 cucharaditas de bicarbonato
• Semillas de amapola para decorar, o cualquier otra semilla que os apetezca.

Preparación:

1. Precalentamos el horno a 180º. 
2. Mezclamos la harina con el bicarbonato y la canela en un bol. Le añadimos la pulpa de la chufa y seguimos mezclando.
3. Trituramos por otro lado el plátano y  añadimos a la mezcla anterior.
4. Para la mantequilla de nueces de macadamia hace falta un poquito más de tiempo. Trituramos con un procesador de alimentos las 2 cucharadas soperas hasta que quede una pasta (podemos hacer más cantidad y utilizar como mantequilla vegetal, al igual que se utiliza la crema de cacahuete) . Para que quede con la textura de crema o mantequilla de cacahuete, debemos procesar durante un minuto. Dejamos reposar unos 3o minutos y volvemos a procesar un minuto más. Repetimos de nuevo, esperando 30 minutos y procesando de nuevo un minuto más. Queda con una textura brillante y muy espesa.
5. Añadimos  esta mantequilla al resto de ingredientes junto con el sirope de ágave. 
6. Mezclamos todos los ingredientes hasta que quede una masa homogénea que se separa fácilmente del bol.
7. Hacemos bolitas con las manos del tamaño de una pelota de golf y las aplastamos para darle forma de galleta. Puede ser que se quede un poco pegada las manos, pero permite totalmente su manipulación. Es por ello que quedan con textura de bizcocho.
8. Las colocamos en papel de hornear encima de la rejilla e introducimos al horno 20 o 25 minutos dependiendo del grosor que le demos y espolvoreamos con las semillas de amapola. ¡Aviso de que se quedan blanditas, ricas ricas!
9. Sacamos del horno, dejamos enfriar y… ¡¡a disfrutarlas!!

   Yo después de enfriarlas las conservo en un bote de cristal y duran unos 3 o 4 días, si es que os resistís.